En la zona alrededor de las calles Jacinto Lara y Alfredo Salazar, en San Isidro, se caracteriza por la presencia de parques de diversos tamaños en el interior de las manzanas. La vegetación, tranquilidad de estos y su relativa seguridad los hace atractivos para la construcción de edificios de mediana altura a su alrededor.
Sobre este terreno de 555m2 con fondo al parque ubicado en la calle Carlos Graña, se ha proyectado un nuevo edificio de 6 pisos de alto. Dada las especificaciones solicitadas por los propietarios se tomó en consideración los siguientes puntos: Contar con un departamento por piso y un Pent House en los últimos niveles. Crear las mejores vistas al parque desde la sala, comedor, estar, terraza y dormitorio principal. Tener circulación vertical y horizontal compacta, sin desperdicio de espacio. Y flexibilidad para modificar los interiores a solicitud de los propietarios de cada departamento.
Ya que el terreno se encuentra flanqueado por un edificio de 5 pisos a un lado y una casa remodelada hace muy poco tiempo al otro, se decidió aprovechar esta situación para pegar el proyecto al edificio existente y crear una tercera fachada colindante con la casa. Por dicha razón la fachada lateral se retira con respecto a la casa, creando un pasaje que desemboca en un amplio patio que ilumina los ambientes interiores.
La articulación de planos, el juego de llenos y vacíos, la sencillez de los acabados y el trabajo de la luz dan continuidad a la propuesta volumétrica y espacial. Pero es la tercera fachada, tratada con la misma jerarquía de la frontal y posterior, lo que permite diseñar la volumetría del edificio como un todo y enriquece las cualidades urbanísticas de la calle.